El Consulado General de Uruguay en las Islas Canarias y la Casa de Colón abren una ventana a la historia de este país con la proyección de la película de César Charlone ‘Artigas, la Redota’ (2011), una coproducción uruguaya y española que traslada a las raíces de la llamada Primera Independencia de dicha nación. El pase, gratuito hasta completar aforo, tendrá lugar este jueves, 15 de junio, a las 19.00 horas.

La velada se inscribe dentro del programa de actividades organizado por el Consulado con motivo de la conmemoración del 192 aniversario de la declaratoria de independencia de la República Oriental de Uruguay y del natalicio del prócer José Artigas, nacido en Montevideo el 19 de junio de 1764. El héroe nacional es interpretado en la película por un intenso y creíble Jorge Esmoris complementado a la perfección por Rodolfo Sancho.

Desde el Consulado se explica que “el filme ofrece una aproximación humana a la figura de Artigas y su tiempo, con una muy buena reconstrucción de época y también se refiere a lo que se conoce como ‘El Éxodo del pueblo oriental’, más conocido como ‘la Redota’. Este término es una acepción que no figura en el Diccionario de la Real Academia Española y que se originó en la época al ser mal pronunciado el vocablo derrota.

El Director de la película quiso conservar el nombre de ‘la Redota’ porque estaba convencido que traducía el verdadero sentimiento de pena, desolación y espíritu de sacrificio de todo el pueblo oriental que emigró tras de su jefe, Artigas, en 1811.

La película se enmarca en el proyecto ‘Los libertadores’ de Televisión Española, integrado por ocho filmes acerca del pensamiento y la obra de las figuras más relevantes de la lucha por la emancipación de América Latina, haciendo especial hincapié, no sólo en los hechos históricos, sino en su faceta más humana y su ideología de carácter libertador. Está producido por Wanda Films y Lusa Films, en coproducción con Televisión Española y se realizó con motivo del Bicentenario de las Independencias de América Latina.

Junto a Esmoris y Sancho, aparecen en la pantalla Yamandú Cruz, Franklin Rodríguez, Gualberto Sosa y Daniel Jorysz. En la película, el famoso pintor Juan Manuel Blanes recibe en 1884 el encargo de recuperar el rostro de una leyenda. Su fuente son los apuntes de Guzmán Larra, espía español que setenta años antes habría intentado asesinar al caudillo José Artigas.

Ese mismo caudillo que, acosado por dos imperios y las intrigas de Buenos Aires, emigró con un pueblo errante y fugitivo, para acampar a orillas del arroyo Ayuí. Sorteando adversidades y en busca de sus destinos, estos tres hombres llegarán a la misma encrucijada: la travesía no tiene un punto de llegada sino apenas un punto de partida.