Gran Canaria ha perdido hoy a uno de los artistas más sobresalientes de la isla y del archipiélago con la muerte a los 83 años del pintor y maestro del retrato Alejandro Reino. Este creador autodidacta y de personalísimo sello mantuvo vínculos estrechos con el Cabildo, institución que expresa públicamente sus condolencias a su familia y allegados.

Reino figura junto a Manolo Millares o Martín Chirino en el Diccionario Biográfico Español de la Real Academia de la Historia. Sus lazos con el Cabildo se ven claramente plasmados en la galería de retratos presidenciales de la Casa-Palacio. Diez de estas obras llevan la firma de un creador nacido en 1935 en Las Palmas de Gran Canaria.

Su aportación a esta colección se divide en dos series, una primera con cuadros de presidentes entre los años 1924 y 1936 realizados tomando fotografías como modelo (Miguel Gaya, Francisco García, Miguel Alonso, Nicolás Cabral y José Lucena) y una segunda que arranca en 1974 y que incluye a Lorenzo Olarte, Carmelo Artiles, José Macías, María Eugenia Márquez y José Miguel Pérez.

La vinculación de este admirador de Caravaggio con los espacios culturales del Cabildo fue además intensa y fructífera durante décadas. En 2015 se inauguró en el Centro de Artes Plásticas su exposición individual ‘Desnudos’, y cuatro años antes el Centro Atlántico de Arte Moderno (CAAM) sacó a flote sus fondos ocultos con una muestra denominada ‘Reinventar la isla, I’, con obras del propio Reino, Tony Gallardo, Manolo Millares o Martín Chirino, entre otros.

También quedan para el recuerdo por su repercusión y éxito de público las exposiciones que protagonizó en la Casa de Colón, otro de sus ‘hogares’ en el ámbito del Cabildo, y que llevaron los títulos de ‘Retratos de la isla’ y ‘Frutos de la tierra’.

Su dominio del arte del retrato otorgó una dimensión internacional a la creación de Reino, cuya obra está presente en colecciones tan importantes como las de la Familia Real de Marruecos, los Reyes de España o el Gobierno de Canarias. Su listado de retratos incluye a Mohamed VI, Hassan II, al Rey Simeón de Bulgaria o personajes como Yves Saint Laurent.

Reino mantuvo su afán de mejora y experimentación artística hasta el final de su vida, siempre embarcado en una filosofía vital y artística donde jamás empeñó su libertad como creador.