Rubén Benítez asegura que el ser humano tiene la necesidad de pasar parte de su vida leyendo, creando y re-creando historias. El escritor teldense y profesor de Filosofía de Enseñanza Secundaria, autor de títulos como ‘De la levedad a la insignificancia’ y ‘Leer a J. L. Borges’, protagoniza el día 24 de octubre, a las 19:00 horas, en la Casa-Museo Pérez Galdós, el ciclo denominado ‘Escritores en la Casa-Museo’ que pone en contacto a distintos autores y autoras con el público con la finalidad de conocer no solo sus intereses literarios sino los protocolos de creación que operan a la hora de plantear sus obras escritas.

A juicio de Rubén Benítez “no existe diferencia entre literatura y filosofía. Ambas buscan lo mismo cada una con su estilo, su lenguaje y sus recursos: el sentido en la que se encuentra inmerso el ser humano”. El autor de 41 años opina que “en el acto de leer y el de escribir se identifica un anhelo por la búsqueda del sentido, porque leyendo se confronta la búsqueda de sentido con las búsquedas de sentido de otras personas. Cuando escribimos un libro intentamos sumar nuestra voz al coro de voces que en esta búsqueda da sentido a nuestro trabajo de creación”.

Quizás por ello, Benítez, que en la actualidad escribe en su blog personal ‘Al pie de la letra’, y es colaborador habitual de plataformas digitales como ‘Revista de Letras’ del periódico catalán La Vanguardia y ‘Viaje a Ítaca’, siente pasión por Borges, “que ha pasado a la historia por ser un excelente cuentista aunque muchos de sus relatos —al menos, los más representativos—, estén inspirados en argumentos filosóficos”.

“Yo leo libros de ficción desde un enfoque filosófico y leo la filosofía desde un enfoque cercano a la crítica literaria. Me gustan muchos esos literatos que trascienden los límites y difuminan las fronteras entre géneros literarios, caso de Borges o Nietzche”, recalca alguien que huye de las etiquetas y que no se encorseta ni en el tratado filosófico ni en la crítica literaria: “El mejor elogio que han hecho de mis textos es que después de leerlos dan ganas de leer a los autores de los que hablo”.

El escritor teldense confiesa que últimamente se inclina por devorar un tipo de lectura de tipo confesional contenida en diarios personales y autobiografías. “Encuentro en este tipo de literatura una pretensión de verdad que me conmueve cada día más. Y también me ocurre al revés: cada vez me cuesta más engancharme a una novela. Se me caen de las manos a las pocas páginas porque las encuentro superficiales, carentes de contenido”, adelantó hace dos años el escritor en una entrevista publicada por el blog literario Dragaria.

Rubén Benítez Florido ha publicado los libros ‘Palos de ciego’ (2011), ‘Llueve sobre mojado’ (2012), ‘Sísifo merece ser feliz’ (2013), ‘Ninguna tregua al olvido’ (2014), ‘Solo lo escrito perdura’ (2015) y ‘Palabras entrevistas’ (2016), ‘De la levedad a la insignificancia’ y ‘Leer a J. L. Borges’. También ha participado en los libros corales ‘Papiromanía. Textos para tiempos difíciles’ (2013) y ‘Proesías. Textos para tiempos difíciles’ (2014).

Colaborador habitual en medios periodísticos y culturales, ha obtenido además diversos premios y menciones en certámenes de poesía, narrativa y relato corto. Además, ha formado parte del jurado del XXI Premio de Poesía Ciudad de Las Palmas de Gran Canaria de 2015 y del I Premio de Narrativa Breve Dolores Campos-Herrero, en 2016.