Hace dos años que el escritor y periodista canario Sebastián de la Nuez Aránega obtuvo con la obra titulada ‘Las Palmas-Caracas-Madrid’, la segunda edición del Premio Regional de Narrativa Breve Dolores Campos Herrero, convocado por la Biblioteca Insular de la consejería de Cultura del Cabildo de Gran Canaria, a través del consejo asesor del Pacto por la Lectura y Escritura de Gran Canaria.

La novela del citado autor se encuentra en la última fase de su edición. En el mes del libro, aunque lamentablemente no podamos celebrarlo, Sebastián de la Nuez se refiere en esta entrevista, contestada desde su domicilio en Madrid, a su título y a sus intereses literario-creativos.

El autor habla de su regreso a España hace cuatro años tras haber permanecido toda su vida en Venezuela. “Me encontré de frente con mi infancia, con mi propio marco sentimental y familiar que siempre supe que estaba allí, aunque lo mantuve como en un limbo durante mucho tiempo, en alguna gaveta del alma, medio escondidas las imágenes, las angustias y alegrías. Afloró todo con una vívida luz renovada. Lo del reencuentro con la infancia ha sido vital. Se verifica en una calle de Vegueta desencadenando recuerdos, o en una lectura que dejó mi padre en su biblioteca abandonada al morir, es decir, adopta muchos rostros pero siempre tengo presente, desde el regreso (sobre todo a Canarias), aquello que decía un poeta: “La niñez no es parte de la vida, es lo profundo, debajo de todo lo que después sucederá”. He encontrado una atmósfera culturalmente bulliciosa y una serie de vestigios en el propio hogar familiar que unieron dos puntas alejadas en el tiempo: el niño que se fue y el periodista y escritor que regresa y entiende, a su modo y según su oficio, estos entornos ahora tan europeos y cosmopolitas”.

Para el novelista “los tiempos vividos en Caracas tienen una sensualidad y una inmediatez que no te dejan pensar mucho, la ciudad es sinónimo de acción. Los de Madrid avanzan detenidos, aunque suene a paradoja”.

Sostiene que las claves de este conjunto de narraciones se resumen en una palabra: reencuentro. “Podríamos decir, como en el libro del filósofo Fernando Savater, que ha sido una excusa para recuperar la infancia. O la adolescencia. Esto se ve sobre todo en las dos primeras narraciones, una que se llama ‘La pensión del perro loco’ y la otra ‘2014’. 

Por otra parte, hay reencuentros geográficos que van más allá de lo cartográfico (por supuesto, porque no se trata de un Atlas): con la Caracas dejada atrás, cuya tragedia revive en pesadillas, y con este campo minado de belleza, cultura y horrores agazapados que es Madrid, donde en lo personal he re-descubierto los vestigios de la Guerra Civil. Hay vestigios físicos y psíquicos. Hay vestigios en muros y suelos, pero también en la cabeza de muchos”.

La novela que ha obtenido el premio de la Biblioteca Insular, ‘Las Palmas–Caracas–Madrid’, será una trilogía en realidad. “No es que haya dicho “me voy a proponer hacer una trilogía con tales y tales elementos” o algo parecido. Lo musical siempre ha marcado la literatura que hago, es como si cada relato breve pudiera ser o leerse como una balada rock, o una guaracha afrolatina, o una pieza de jazz que da pábilo a la improvisación de cada uno de los miembros de un cuarteto con sus tonalidades abstractas y digresiones temáticas”, dice. “Al lector se le habla en un texto, aun cuando haya sido escrito hace varios siglos, de algo que sigue siendo muy actual porque atañe a la condición humana y al mismo tiempo le resulta enigmático, misterioso, divertido, terrible o épico o fantástico”.

Cuando De la Nuez avanza algunos resortes de su literatura señala que “de alguna manera resumen sus valores, o más bien les dan su sitio. Claro que buscar un fundamento teórico al trabajo propio resulta forzado porque, personalmente, cada uno de estos textos resuena a melodía. Son como canciones que ha llevado largo tiempo por dentro y en algún momento ha sido capaz de poner en solfa, con sus corcheas y sus espacios de silencio. Lo cual es un prodigio. Es difícil teorizar sobre algo tan de adentro”, admite el escritor.

“A fin de cuentas, estas cosas pertenecen al terreno ingrávido, sin nombre, donde reinan los espíritus malignos, pero también los ángeles o algo parecido a los ángeles. Claro que podría hablarse de estructura, tempo, elipsis, búsqueda temática, influencias… Igual. ¿Cómo poner nombre a lo que has logrado estructurar sabiendo que uno apela, siempre y a final de cuentas, a todo lo que ha leído, escuchado, visto, padecido y sentido? Todo ello hace una masa informe. Arrancas pedazos de esa masa, juegas con ellos y haces una historia”, agrega.

SEBASTIÁN DE LA NUEZ ARÁNEGA

Nacido en Las Palmas de Gran Canaria, es licenciado en Comunicación Social por la Universidad Católica Andrés Bello de Caracas. Realizó una pasantía al lado del escritor y periodista Tomás Eloy Martínez en El Diario de Caracas (1979-80) y trabajó después en el área creativa de Publicidad ARS, la principal del país, para enfocarse luego en el periodismo, comenzando como redactor y reportero en El Diario de Caracas hasta llegar a ser jefe de Redacción en varios medios.

Experiencias claves fueron el suplemento Feriado de El Nacional y el diario Tal Cual, dirigido por Teodoro Petkoff.

También ha practicado periodismo institucional y radiofónico. Colaborador de numerosas publicaciones venezolanas, autor de los libros ‘Déjalo sangrar’ (reportaje, Editorial Fuentes, 1994); ‘Marisabel, la historia te absolverá’ (semblanza, Editorial Exceso, 2003); ‘Calles de lluvia, cuartos de pensión’ (cuentos, ganador de la sexta edición del Concurso Transgenérico de la Fundación para la Cultura Urbana - Caracas, 2007) y ‘Rosalía’ (novela, Editorial Alfaguara, 2010).

Desde 2004 a 2007 ejerció como Defensor del Lector en el diario Últimas Noticias, el de mayor tirada del país. Es profesor de las materias Periodismo de Investigación y Entrevista Periodística en la Escuela de Comunicación Social de la UCAB.

Mantuvo la columna “Libros, periodismo, medios” en el periódico Tal Cual los días viernes, en la contraportada, durante cinco años. Realizó un programa de doctorado en la Facultad de Ciencias de la Información en la Universidad de La Laguna en 2008, aunque no presentó tesina final.

Mantiene el blog hableconmigo.com con entrevistas, crónicas y comentarios. Desde septiembre de 2011 hasta octubre de 2016 fue director general de Comunicación, Mercadeo y Promoción en la Universidad Católica Andrés Bello. A partir de esa fecha se ha radicado en Madrid, donde es socio del portal de noticias Actualy.es e imparte talleres y cursos de periodismo y narración literaria.