El artista galdense Cristóbal Guerra exhibe en la Casa-Museo León y Castillo del Telde sus últimas obras plásticas incluidas en las series ‘La Ciudad Superpuesta’ y ‘El Palacio de los Guanartemes’, en las que Guerra profundiza en la historia de su ciudad natal, Gáldar. La muestra se inaugura el día 5 de noviembre, a las 19:00 horas, y permanecerá abierta en el museo teldense dependiente de la Consejería de Cultura del Cabildo grancanario hasta el 10 de enero de 2021.

En palabras de Carlos Díaz-Bertrana, Óscar Domínguez inventa recuerdos del porvenir y Cristóbal Guerra, más telúrico que surreal, pinta lo que ve con un lenguaje universal, el de la abstracción geométrica, con una confianza ciega en el poder emocional del color. Enraizado en su territorio natal, el artista profundiza en sus series, ‘La ciudad superpuesta­’ ­–en la que ha estado trabajando intermitentemente desde 1988­– y ‘El Palacio de los Guanartemes’, en la historia de la mítica Agáldar, antigua sede de los Guanartemes de Gran Canaria, de su Palacio Real y su corte. “De sus ruinas y de las excavaciones en el entorno de la Cueva Pintada emergen sus pinturas que recrean e imaginan las estructuras cruciformes de las viviendas aborígenes”, avanza Díaz-Bertrana.

La muestra está integrada por 39 acrílicos sobre lienzo y lona que dan continuidad a su viaje emocional hacia el pasado mítico y a la simbología, sin olvidar el presente y su entorno. Al mundo apresurado y frenético de la modernidad, Cristóbal Guerra responde con una poética calma, que invita a mirar hacia adentro, a la meditación, a valorar el espacio y la soledad del ser. Son pinturas silentes, las de un mundo vegetal y mineral, donde no hay seres humanos ni ruidos. Es la luz la que dibuja, marca las texturas y talla las formas.

“Las pinturas de ambas series nos recuerdan visiones aéreas que recrean la geometría tectónica de la ciudad hibernada en el tiempo, que despierta y renace gracias al trabajo de los arqueólogos y la inventiva de Cristóbal Guerra. Visiones desde la poética del vértigo, visiones desde lo alto que recrean la geometría tectónica de la ciudad hibernada en el tiempo, que despierta y renace gracias al trabajo de los arqueólogos y la inventiva del artista de la generación de los ochenta”, en palabras de Díaz-Bertrana.  

Al artista de la luz de Agáldar le impactó de joven la euforia arqueológica que vivía su ciudad, el trasiego de piedras y memoria, la delimitación del actual Parque Arqueológico de Cueva Pintada y las catas geométricas en el terreno. Encuentra su propia voz en la abstracción geométrica, para él la luz es el mejor recurso pictórico para representar el tiempo y admira el tiempo universal de la geometría, el que discurre en los lienzos de los maestros de la nueva abstracción: Ellsworth Kelly, Frank Stella, Sean Scully, Sol Le Witt…

La exposición de Cristóbal Guerra se podrá visitar hasta 10 de enero, en horario de martes a domingo, de 10:00 horas a 18:00 horas, en la Casa-Museo León y Castillo de Telde.