Con su pluma, Sor Juana Inés de la cruz, escritora mexicana del Siglo de Oro, defendió en todo momento el derecho a la educación y a la libre determinación femeninas, criticando la violencia e hipocresía de los hombres. “Su figura es enarbolada hoy como un símbolo de libertad”, destaca la escritora Sandra Lorenzano. Por eso, la celebración del Día de Muertos ‘¡Que viva México!’ en la Casa de Colón está dedicada este año 2022 a su figura. La presentación del tradicional altar conmemorativo en el patio del museo tendrá lugar el día 27 de octubre, a las 19:30 horas, con entrada libre.

El acto de inauguración, que supone el pistoletazo de salida de las actividades escolares y talleres familiares que tendrán lugar durante el mes de noviembre, será presentado por Victoria Galván González, directora de la Casa Museo Pérez Galdós y especialista en literatura barroca, quien hará una introducción a la figura y trascendencia de Sor Juana.

La música tomará la palabra a continuación, a través del concierto de ‘Puertas al Sur’ o, lo que es lo mismo, Beatriz Alonso (voz) y Miguel Manescau (guitarra). El dúo rinde homenaje a la cultura latinoamericana, a su riqueza literaria y a su imaginario musical, a través de la interpretación de temas musicales representativos de la identidad latina con una mirada especial sobre México, -país de rico mestizaje cultural y grandeza intelectual-, a través de su música y sus grandes actores y autoras.

El espectáculo incluye, además de obras musicales de grandes compositores, las voces y palabras de grandes intelectuales de este amplio territorio, a través de audios que permitirán ampliar el conocimiento sobre estos géneros musicales y figuras relevantes del patrimonio cultural de Latinoamérica, según adelantaron Beatriz y Miguel.

Un viaje por las melodías, las letras y la retórica del sur intentará llevar de la mano al espectador a una zona de contemplación, entretenimiento y deleite. “Cruzando puertas, nos encontraremos con personajes como Chabuca Granda, Chavela Vargas, Armando Manzanero, Rigoberta Menchú o Jorge Luis Borges”, adelantan los artistas.

‘Puertas al Sur’ nace bajo la tutela del ‘Proyecto Tiempo’ (Trabajo de Investigación y Evolución de las Músicas Populares), de ‘Mousikê La Laguna’. A lo largo de 7 años de trabajo, el dúo ha editado un trabajo discográfico en el que unen clásicos de la canción latinoamericana, utilizando como hilo conductor las voces de ilustres pensadores sudamericanos. Este trabajo ha sido presentado en los principales escenarios de las Islas Canarias, así como en diversas ciudades españolas, como Madrid, Almería o Barcelona.

Durante el mes de noviembre se celebrarán diversos talleres para familias y escolares en torno al altar, la tradición mexicana y la huella de Sor Juana, en combinación con el festival WOMAD.

Semblanza de Sor Juana Inés de la Cruz. Por Sandra Lorenzano

Juana Inés de Asbaje y Ramírez de Santillana nacida en Nepantla, México, en ¿1648/1651? Está considerada una de las voces literarias más importantes de la historia de la lengua castellana.  De deslumbrante inteligencia, desde muy pequeña mostró enorme curiosidad y afán de conocimiento. En el texto autobiográfico llamado ‘Respuesta a Sor Filotea’, cuenta cómo a los cuatro años se escapaba de la casa para seguir a su hermana mayor a la escuela porque quería aprender a leer. Siendo ya adolescente, un grupo formado por los mayores sabios de la Nueva España la sometieron a un examen, del que salió airosa, porque no podían creer aquello que se decía sobre los profundos conocimientos de esa muchacha, hija natural, que venía de un pueblo apartado y pobre.

Pero era una época en que el estudio estaba prohibido a las mujeres, no tenían más opción que el matrimonio o el convento, y éste último era un espacio que parecía más propicio para lo único que ella realmente quería: estudiar, saber. Fue así que se convirtió en monja jerónima e hizo de su celda un increíble espacio de vínculo con el mundo: allí tuvo una biblioteca de miles de volúmenes, una colección de aparatos astronómicos y otra de instrumentos musicales -dos de sus principales pasiones-; desde ese lugar de clausura se carteó con los principales pensadores y científicos de su época, y escribió una de las obras literarias más excepcionales de nuestra historia.

Los poderes, en especial el de la Iglesia Católica, no toleraron que una monja transgrediera así el destino de silencio y sumisión que las mujeres tenían asignado. Por ello, la condenaron a abandonar todo aquello que constituía su vida: la escritura, la creación, los libros, el saber. Murió durante una epidemia en el año 1695 en el Convento de San Jerónimo en la Ciudad de México. La figura de Sor Juana Inés de la Cruz es enarbolada hoy como un símbolo de libertad.