Durante la sesión de los cambios de escenarios que tendrán lugar en el marco de la 35º edición del Encuentro de Música Teresa de Bolívar que se celebrará los días 13 y 14 de septiembre, el dj Carlos Belda promete divertir al público con una mezcla de géneros que van desde el afro, hasta el funk, pasando por el disco y los sonidos caribeños, “todos ellos fluyendo para crear una experiencia sonora envolvente. La intención es conectar diferentes tradiciones musicales con un toque moderno, manteniendo siempre una energía alta que invite al baile y a la reflexión”, explica Belda.

Al dj canario, un gran conocido en la escena contracultural de la capital grancanaria, le parece que el notable cambio que experimenta este año el cartel del evento que impulsa en Teror la Consejería de Cultura del Cabildo grancanario a través de la Fundación Nanino Díaz Cutillas con la incorporación de estilos musicales más eclécticos y modernos a su propuesta, “era positivo y necesario. La música, como cualquier forma de arte, está en constante evolución, y es importante que eventos históricos como este reflejen esa diversidad. Creo que el público, aunque esté acostumbrado a sonidos tradicionales, apreciará la inclusión de estilos más eclécticos. Al final, se trata de crear un puente entre lo antiguo y lo nuevo, y de mantener viva la música en todas sus formas”, señala.

Se define como un dj “que explora y experimenta con diferentes culturas y sonidos. Mis sesiones son variadas porque no solo mezclo música; cuento historias a través de ellas. Me gusta tomar elementos de diferentes géneros y épocas para crear algo fresco y único que resuene tanto en lo emocional como en lo físico, invitando a la audiencia a un viaje sensorial”. Explica que sus referentes son variados, pero algunos nombres clave serían Orlando Julius o Fela Kuti por su innovación en el Afrobeat, Cut CHemist o DJ Harvey por su habilidad para mezclar géneros de manera impredecible, así como Gilles Peterson por su enfoque global y curaduría ecléctica.

Conectar con el público

Belda considera que el mayor reto de cualquier sesión a la que se enfrenta
“es siempre conectar con el público. Cada audiencia es diferente, y leer la energía de la gente para adaptar la música en consecuencia es clave. No se trata solo de tocar canciones, sino de crear una atmósfera que haga que el público se sienta parte de algo especial”.

“Una idea equivocada es que ser DJ es solo poner música preseleccionada. En realidad, es un trabajo que requiere un profundo conocimiento de la música, la habilidad para leer a la audiencia y la capacidad de mezclar y crear algo nuevo en tiempo real”, advierte el dj canario al subrayar su tarea como artista.

Confiesa que le inspiran artistas internacionales como Kaytranada, Bongo Hop, NIckodemus, BosQ, etcétera, “aunque la verdadera inspiración está en la escena canaria. Hay infinidad de grupos y proyectos muy inspiradores y casi desconocidos por parte de la audiencia. Ejemplos de ello tenemos a Rabiche, Alizuhl, Tawant, ALba Gil, _Usted, Keiko, Conqueror Project, Sunday German FLowers y muchísimos más”.

Reconoce que los cambios del gusto del público influyen en su trabajo. “Me gusta estar al tanto de las nuevas tendencias, pero también me esfuerzo por mantener un equilibrio entre lo que es popular y lo que es auténtico para mí. Es importante evolucionar sin perder la esencia”. Sobre la situación y panorama profesional de los djs en Canarias sostiene que existe “un creciente interés por la música alternativa y eventos culturales, pero aún falta infraestructura y más espacios dedicados exclusivamente a la música en vivo y la cultura DJ. Con todo, la escena está en expansión y hay un potencial enorme para crecer si se siguen creando oportunidades”.

Para mí “lo más importante es que la música se sienta. No importa el género o la tendencia; lo esencial es que, cuando la música suena, el público se conecte emocionalmente y disfrute del momento presente”, concluye Carlos Belda. A buen seguro sucederá en la sesión que protagonice en la Plaza de Sintes.