Noticia: Los hermanos León y Castillo, claves para la segunda globalización en Canarias gracias al comercio de tabaco y azúcar
1 de diciembre de 2020
Los historiadores Santiago de Luxán y María de los Reyes Hernández, de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, expusieron hoy en la segunda jornada del Coloquio de Historia Canario-Americana el papel relevante que tuvieron los hermanos León y Castillo en la segunda globalización en Canarias, que se inicia con la declaración de Puertos Francos en 1852 y que incluye la producción de tabaco y azúcar.
Este período, desde el punto de vista económico, tiene una gran trascendencia, porque se entra en el proceso de dotación de infraestructuras modernas que incrementan la conectividad del archipiélago, así como la dotación de servicios urbanos, apuntaron los historiadores.
En este contexto, la crisis de la cochinilla, de la que Canarias ha sido la primera productora mundial, empieza a vislumbrarse desde la década de los años 60, por lo que un grupo de propietarios, comerciantes y políticos canarios se vuelven hacia el tabaco primero y hacia el azúcar después, como posibles soluciones que hagan entrar a las islas en un nuevo ciclo productivo.
Y es aquí donde intervienen los hermanos Juan y Fernando León y Castillo en estos dos subsectores que suponen una iniciativa que pretende disminuir la vulnerabilidad de la economía insular y su absoluta dependencia del sector primario, con soluciones industrializadoras. La actuación de ambos personajes va más allá de estos dos apartados y ambos tienen una participación diferente, ya que el mayor, Juan, está directamente involucrado en la producción, tanto del tabaco como del azúcar, mientras el segundo, Fernando, tiene una actuación básicamente institucional y política, como el gran negociador y conseguidor.
De Luxán explicó que a mediados del siglo XIX se dan muchos elementos que pueden colocar a las islas en una situación de crisis extrema, con escala diferente, pero semejante a la de ahora, como extrema pobreza, sequías, cólera morbo, emigración y analfabetismo. Por eso se explica cómo reacciona la sociedad canaria para conseguir un cambio del modelo institucional, que son los puertos francos.
La datación más antigua de Gran Canaria
En esta segunda jornada de la cita bienal, que tiene como temática ‘Los procesos de globalización en el Atlántico por el 500 aniversario de la primera circunnavegación, los arqueólogos de la empresa Tibicena expusieron los resultados de los trabajos arqueológicos realizados en 2019 y 2020 en La Fortaleza de Santa Lucía de Tirajana, que ha desvelado que la datación de un pequeño hueso de un feto o de un bebé prematuro es de finales del siglo IV y primer tercio del VI, hecho que retrasa en casi un siglo la antigüedad de ocupación del yacimiento y lo convierte además en la datación más antigua para toda la isla de Gran Canaria.
El yacimiento de La Fortaleza , con más de 1.300 años de antigüedad, lleva cerca de cinco años con intervenciones arqueológicas continuadas gracias a la inversión del Cabildo de Gran Canaria, por lo que cada nueva excavación arqueológica y estudio en este espacio revela aspectos no conocidos del mismo y de la propia arqueología grancanaria. Además de esta nueva datación, también se dieron a conocer los datos de la excavación realizada este año en las estructuras tumulares descubiertas en el año 2007, en la que no se hallaron restos humanos, por lo que están vinculados a espacios monumentales o marcadores de espacios funerarios.
La excavación de este lugar no documentó apenas material arqueológico, pero sí se puedo datar restos de ovicápridos de finales del siglo XV y el siglo XVII, lo que revela que este monumento estuvo visible al menos durante estos siglos para más tarde cubrirse por las propias tareas de despedregue agrícola, explicó Marco Moreno.
Por su parte, dentro del seminario de los procesos de globalización en la historia atlántica, Larisa Pérez, de Tenerife Espacio de las Artes y de la Universidad de La Laguna, ofreció la conferencia ‘Canarias criolla: raza, sexo y colonialidad’, en la que explicó que Canarias desempeña un rol fundamental en los orígenes de la modernidad. Frente a la retórica decolonial de 1492, encontramos un territorio africano como sujeto a un nuevo modo de entender la empresa colonial inaugurado por la cristiandad latina, expuso.
Como todo territorio afectado por la expansión atlántica, la naciente sociedad canaria fue organizada según un patrón racista y sexista de poder, donde la raza no era un eje estructurante de la identidad canaria, sino la clase, agregó. Además, en la sociedad canaria no solo hay un pacto entre élites, sino que hay un pacto entre hombres, que dejó en estado de subalternidad a la mitad de la población, las mujeres.
La segunda jornada del Coloquio de Historia Canario-Americana, que acoge la Casa de Colón hasta el 3 de diciembre, ofrece medio centenar de ponencias, como las aportaciones arqueológicas para su estudio de la Cueva de Villaverde (Fuerteventura), resultados preliminares de los trabajos arqueológicos en el Conchero de Punta del Mallorquín II, en El Cotillo; un análisis de la malacofauna marina en Lomo de los Melones, en Telde, y nuevos trabajos de documentación de las pinturas murales de la cámara policromada de la Cueva Pintada de Gáldar, entre muchas otras temáticas.
La XXIV edición del Coloquio, que arrancó el lunes y acoge más de 220 ponencias hasta el 3 de diciembre, puede seguirse en directo a través de los canales de YouTube y Facebook Live del museo. Toda la información y el programa completo de esta cita académica bienal, dedicada en esta ocasión a los procesos de globalización en el Atlántico, está disponible en la web www.coloquiosdehistoriacanarioamericana.com.