La Casa de Colón acoge el día 21 de diciembre, a las 19:30 horas, la presentación del libro ‘Doña Juana de Austria. La princesa gobernadora’, un trabajo del historiador Manuel Lobo Cabrera que da luz y voz propia a este mujer, cuyo prestigio se vio opacado por las figuras de su padre, el emperador Carlos V, y de su hermano, el rey Felipe II.

La princesa Juana de Austria, gobernadora de los reinos de España, ha sido considerada por los historiadores como una de las personalidades femeninas más importantes, ya sea espiritual, artística y políticamente, de la España y Europa del siglo XVI, explica Lobo.

Sin embargo, pese a ser valorada como una mujer de gran cultura, dueña de un magnífico patrimonio artístico y de una espléndida biblioteca, su valía se vio oscurecida por la sombra de su padre y hermano, apunta Lobo, quien será el encargado de presentar este libro, de Ediciones Universidad de Valladolid, junto a la directora de la Casa de Colón, Elena Acosta.

La idea de escribir este trabajo surge de una investigación anterior sobre la figura del príncipe don Carlos, hijo de Felipe II, al cual Juana de Austria se entregó en cuerpo y alma desde que el niño era pequeño, detalla el escritor. Y a medida que investigaba a Carlos, aparecía continuamente la figura de su tía, por lo que cobró interés y comenzó a consultar cada vez más bibliografía sobre ella hasta comprobar que era un personaje muy particular, con unas dotes excepcionales a las cuales no se le había dedicado mucho espacio, explica.

Al catedrático de Historia Moderna y ex rector de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria le llevó cinco años buscar información sobre ella para realizar este libro, ya que hay mucha bibliografía, pero no dedicada a su figura en concreto, sino sobre su padre y su hermano, y sobre las relaciones que tuvo con los artistas, como pintores, escultores y literatos.

Lobo apunta que cuando se habla de ella, los historiadores destacan que era culta, la primera mujer que fue jesuita cuando la Orden no las admitía y que era la madre del rey Sebastián de Portugal. Sin embargo, al analizar toda la documentación se da cuenta de que es una mujer con “una importancia tremenda dentro de lo que es la historia de España” con poder decisión y por eso se llama la princesa gobernadora.

El autor de este trabajo reconoce que los historiadores que se han dedicado a escribir sobre ella la oscurecen, cuando en realidad realizó un gobierno magnífico en un momento que no fue sencillo porque tuvo que afrontar declarar España en bancarrota y solventar que el gobierno se quedara sin dinero para llevar adelante las empresas. Y ella se empeñó en resolverlo.

Juana de Austria gobernó los reinos de España desde 1554 a 1559, pese a que su padre no estaba inicialmente a favor de que fuera la regente, ya que fue una decisión del hermano. Sin embargo, Carlos V se dio cuenta posteriormente de que era una mujer que tenía una valía tremenda, afirma Lobo.

El escritor relata que la denominada princesa gobernadora creó una especie de partido político entorno a la corte, tenía ideas avanzadas para la época, era una mujer liberal para el momento por su concepción religiosa del mundo distinta y eso le llevó a tener una relación muy fluida  y muy cercana con la Compañía de Jesús, los jesuitas, a la que entró con dos pseudónimos, Mateo Sánchez y Montoya, porque estaba prohibido admitir a mujeres.

En el libro, el escritor expone la vida de esta mujer desde su nacimiento en 1535 hasta su muerte en 1573, pasando por todas las facetas de su vida y analizando incluso su propio testamento, donde ella hace un recuento de su actividad. Se trata de una secuencia de su trayectoria relatado de una manera cercana al lector, al que da cuenta de su formación, de su educación y de su matrimonio.

Lobo explica que la importancia que tuvo esta mujer se ve reflejada en un escrito de un personaje contemporáneo a ella, que tras su muerte le dedica un párrafo que resume lo que era, ya que asegura que “allí la enterraron con grande majestad aunque inferior a sus méritos”, y entre otras cualidades resaltaba que era “hermosa, honesta, liberada, afable, discreta, misericordiosa, favorecedora de los pobres, de generosa condición, con virtudes tan excelentes, que en esta y en la otra vida es inmortal entre los justos que resplandecen como el sol. Gobernó en España en las ausencias del emperador, su padre, y de su hermano, don Felipe, maravillosamente, y así en los reinos fue venerada y amada”.

“Juana de Austria estaba orgullosa de ser miembro de la dinastía y sacrifica en parte su vida a favor ella”, asegura Lobo, quien explica que en la portada de su libro aparece apoyada en una columna, símbolo de la dinastía, ya que al pie se lee FCV, ‘filia’ de Carlos V.

La entrada para acudir a esta presentación en la Casa de Colón es gratuita y las plazas ‘online’ ya están agotadas, aunque se ha reservado un porcentaje para la inscripción de modo presencial en la entrada de la conferencia, que serán entregadas por estricto orden de llegada hasta completar el aforo limitado.